AGRIDULCE: LA PROVOCACIÓN, UN CLARO SÍNTOMA DE LA INTOLERANCIA.

-AGRIDULCE: LA PROVOCACIÓN, SÍNTOMA DE INTOLERANCIA.


AGRIDULCE, EXZPRESIONES y MÁS.
Mtro. José A. Ordóñez González.

En la resolución que invalida el Plan B electoral del presidente LÓPEZ OBRADOR, lo único que evidenció la SCJN fue la forma en que se llevó a cabo el procedimiento legislativo, -desaseado, inequitativo con los partidos minoritarios y generando conflicto-, y no el contenido de dicha reforma.

Por tanto, la SCJN no entró a resolver el fondo del asunto, sino el cómo actuaron los legisladores, violando gravemente el proceso legislativo, no obstante que con ello atentaron contra  la Constitución, aquella que al protestar el cargo juraron respetar y defender. 

MORENA junto con sus aliados poseen la mayoría legislativa simple, -suficiente para lograr su propósito-, era innecesario romper las reglas y agredir los derechos de los partidos minoritarios, que fueron los que acudieron ante la Suprema Corte.
Por todo ello, pareciera un plan siniestro, es decir una clara provocación planeada por el presidente para generar una reacción que conduzca a un conflicto, ya que la provocación le permite victimizarse argumentando un complot de los conservadores en contra del pueblo y su gobierno.

De esta manera, con esa narrativa de alto impacto, hace campaña para convencer a la ciudadanía de que necesita tener mayoría legislativa calificada, -o sea, lasa dos terceras partes de legisladores afines a su proyecto-, para hacer cambios constitucionales drásticos. Con esos argumentos y su posición de víctima del conservadurismo estará solicitado a la ciudadanía su voto en las próximas elecciones, sobre todo las presidenciales del 2024 en las que se renuevan ambas cámaras, la de diputados y senadores del Congreso de la Unión.

Además, esbirros cercanos al  mandatario federal, como CUITLÁHUAC GARCÍA quien gobierna Veracruz, está llamando  a realizar una manifestación y protesta para cerrar los accesos a la SCJN e impedir el ingreso de los Ministros y personal que ahí labora, estos actos de por si ilegales, por consistir en una verdadera provocación contra el estado de derecho y el respeto a la autonomía de otro poder constituido, pudieran desbordarse y conducir al caos, como ya lo vimos cuando una a horda de personajes cercanos a MARTÍ BATRES y al propio presidente agredieron a personal que confundieron con un ministro de la Corte cuando salía del edificio aledaño a palacio nacional y se trasladaba en su vehículo después de concluir sus labores diarias.

Con esas acciones, el gobierno de la 4T intenta deslegitimar a la SCJN, al INAI al INE y al TEPJF, argumentando que sus miembros no provienen de una elección popular, como si esto fuera la solución.

Lo cierto es que los ministros de la SCJN y los consejeros del INE no se dejan influir o mangonear a favor de lo que decide el Presidente.

Los cargos en la SCJN requieren de personas preparadas con conocimientos muy técnicos y de una vasta experiencia que no se deriva del simple sentido común, sino del conocimiento preciso de las leyes. Tan es así que otro poder, -el Legislativo-, los designa después de un proceso de selección donde se evalúa su trayectoria profesional. Además, esas son las reglas establecidas en la Constitución Federal.

Lo inconcebible es observar como el sentimiento popular es azuzado para deslegitimar, se está actuando en contra del Estado de Derecho, pues se está saboteando al orden constitucional. Se polariza a la sociedad y se le invita a provocar actos de violencia en contra de aquellas instituciones del estado y de sus integrantes que no ceden ante las presiones ilegales y malsanas del ejecutivo.

La propuesta de AMLO de modificar la Constitución para que los candidatos a estos cargos sean elegidos por votación popular, responde a una visión populista, que en nada favorece las circunstancias actuales por las que atraviesa la nación.
El “populismo”, como corriente política, es la manipulación del ánimo colectivo exacerbando las emociones de la ciudadanía, para controlarlas y dirigirlas hacia donde están los intereses de quien se erige como caudillo, disfrazando de democráticas las decisiones personales que pretende imponer. Eso sucede actualmente en nuestro país, con la pretensión de un mandatario que desea tener el control de los otros dos poderes de la unión y de los órganos autónomos.

Resulta claro entender que el Poder Legislativo no tiene control sobre la actuación del poder judicial, que junto con el Ejecutivo y el Legislativo, conforman los Tres Poderes de la Unión. Este equilibrio entre los poderes es lo que legitima la democracia. El único encargado de llevar a cabo el control jurisdiccional de los otros poderes es precisamente el Judicial, a través del pleno de la SCJN.

A mis asiduos lectores les comento que es cierto que el Senado tiene la atribución de seleccionar a los ministros de la SCJN, pero esto no significa que tenga también control sobre su actuación. Sería un despropósito y un abuso de poder.

Lo AGRIDULCE es la forma como el presidente e integrantes del gobierno de la 4T y de morena, llaman a la ciudadanía a protestar y clausurar para el día 20 de mayo, los accesos a las instalaciones de la SCJN. No es legal azuzar y manipular a la gente para esos vanos e indeseables propósitos autoritarios. El respeto al derecho ajeno es la paz. La provocación es una característica de los intolerantes.

Al final, la diversidad de opiniones y visiones políticas confluyen para establecer un régimen democrático, basado además en el equilibrio de poderes. Ningún poder esta por encima de otro, por eso, el pretender controlarlos es una señal inequívoca de autoritarismo. ¡HE DICHO¡

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