CASO CONTRA DONALD TRUMP: ¿JUSTICIA o IMPEDIR QUE LLEGUE A LA PRESIDENCIA?

-AGRIDULCE: ¿QUÉ SE BUSCA CON EL ENCAUSAMIENTO DE DONALD TRUMP? –

-a) JUSTICIA; o, b) TRUNCAR SU CAMINO A LA PRESIDENCIA.



AGRIDULCE, EXPRESIONES y MÁS.
Mtro. José A. Ordóñez González.

Durante la lectura de los cargos criminales, los fiscales de Estados Unidos aseguraron que el expresidente DONALD TRUMP falsificó los registros de sus empresas como parte de un plan para engañar al fisco.

De acuerdo con expertos, este cargo resulta mucho más fácil de probar, y además permite a los fiscales esquivar las posibles lagunas legales de los otros cargos.

Se trata de 34 falsificaciones en los libros relacionados con los desembolsos que en 2017 le hizo TRUMP a MICHAEL COHEN, su ex abogado.

Poco antes de las elecciones de 2016, Cohen le había pagado $130 mil dólares a la actriz porno STORMY DANIELS para silenciarla y que dejara de hablar de la supuesta relación que había tenido con Trump.
Como sustento de los delitos que se le atribuyen a DONALD TRUMP, la fiscalía exhibió varios documentos concernientes a esos desembolsos a COHEN que fueron registrados falsamente como pagos por honorarios legales durante 2017.

Para cada uno de esos 34 registros, el gran jurado acusó a Trump de fraude fiscal, bajo el artículo 175 del Código Penal del estado de Nueva York.

De ser encontrado culpable, TRUMP enfrentaría una condena de hasta cuatro años de cárcel.

Cabe señalar que el fraude fiscal en los libros usualmente es un delito menor. Para que llegue a la categoría de delito grave, los fiscales deben demostrar que el propósito del acusado era cometer, facilitar u ocultar un segundo delito, lo que despierta la incógnita sobre qué otro delito piensa imputarle el fiscal BRAGG.

En la pasada audiencia de lectura de cargos del martes, el fiscal presentó teorías sobre ese segundo delito, para darles a los jueces y miembros del jurado varias rutas alternativas conducentes a demostrar que el fraude en los libros fue un delito grave, y no un delito menor.

BRAGG y su equipo apuntan a encontrar presuntas violaciones tanto a las leyes federales como a las del estado de Nueva York, profundizando una línea de investigación que ha dado que pensar incluso a los más acérrimos detractores de TRUMP.

Por otra parte, los cargos imputados a TRUMP pueden resultar ambiguos, si pagarle a una amante o sexo servidora fue un gasto de campaña o un gasto personal.

De acuerdo a las reglas de competencia de las autoridades para procesar este tipo de asuntos, cabe mencionar que la materia del proceso legal, invocando una ley federal suscita una duda sin precedentes.

Cabe preguntarnos entonces lo siguiente: ¿puede un fiscal de distrito citar un delito federal, aunque no tenga jurisdicción para presentar cargos por ese delito?

Sin embargo, el artículo 175 de la Legislación Penal del estado de Nueva York no señala que ese segundo crimen que se quiere cometer y ocultar deba ser exclusivamente una violación a una ley local, y no federal.

El fiscal BRAGG mencionó en la conferencia de prensa de aquel martes tanto a la ley electoral del estado de Nueva York como la ley federal de alcance nacional. Citó la ley electoral de Nueva York que califica como un delito menor conspirar para impulsar una candidatura por medios ilegales, pero no explicó por qué esa ley podría aplicarse a una elección presidencial. También hizo mención al tope de aportes de campaña que establece la ley federal, pero sin explicar por qué él tendría autoridad para invocar un delito sobre el que no tiene jurisdicción para presentar cargos. Todo un dilema jurídico.

En la narrativa de los hechos de la Fiscalía, se describe cómo TRUMP le pagó a COHEN más de lo que este finalmente le había pagado a Daniels, para cubrir el impuesto a las ganancias que debía afrontar el abogado COHEN por ese dinero que había recibido.

Presentar información falsa al fisco de Nueva York es un delito. En ese sentido, el plan de mentirle al fisco para aparentar que COHEN había obtenido esos ingresos por honorarios de servicios legales prestados en 2017, podía ser considerado un delito en sí mismo.

Para que el abogado COHEN recuperara lo que le había cobrado el fisco como impuesto a las ganancias por esos pagos, de acuerdo con TRUMP, planificaron una última declaración falsa para completar el fraude, consistente en registrar falsamente los reembolsos que recibió Cohen como nuevos ingresos. Esto dice la Fiscalía y es lo que pretende acreditar en este caso.

Por ello se acusó al ex presidente de hacer que la Organización Trump fraguara sus libros y registrara falsamente la verdadera naturaleza del pago, para cubrirse ante el fisco.

Lo interesante de este asunto es cómo hará la fiscalía para convertir el fraude contable en un delito grave.
Sobre este tenebroso caso, varios especialistas en derecho electoral expresaron nuevas dudas sobre si al Fiscal le alcanzaría con las violaciones a la ley de financiamiento de campañas para elevar los cargos de fraude contable a la categoría de delitos graves. Entre esos escépticos se cuentan RICHARD L. HASEN, jurista experto de la Universidad de California, y BENJAMIN L. GINSBERG, histórico especialista en derecho electoral del Partido Republicano y un hombre muy crítico de TRUMP.

A mis fieles lectores les comento que será en la próxima fase del proceso, cuando se obligue a los fiscales a dar más detalles sobre este tema, precisamente porque están obligados a revelar sus pruebas.

Lo AGRIDULCE del tema expuesto es darnos cuenta como en Estados Unidos se procesa penalmente a cualquier ciudadano por importante que este sea. Se aplica la ley por igual, al menos esta es la lección que nos deja a los mexicanos, que aún no hemos aprendido a procesar a los ex presidentes con todo y que existan pruebas suficientes para acusarlos de delitos de enriquecimiento ilícito, lavado de dinero y aquellos derivados de su forma corrupta de actuar durante sus respectivas gestiones de gobierno.

Al final, es cierto que en todos estos temas políticos existen intereses contrapuestos y se dan con todo. Ojalá que todo sea por hacer justicia y no un show mediático para frustrar los intentos renovados de Trump de llegar nuevamente a la Presidencia de los Estados Unidos. ¡HE DICHO ¡